ORACIÓN DE LA NOCHE DEL MIÉRCOLES 1 DE FEBRERO

Señor, gracias por el día que he vivido y por tu compañía. Quiero entregarte mi descanso, no importa cuán cansado me sienta, quiero encomendarme a Ti, agradecido por cada una de las cosas que me has dado, con tu guía sé que podré alcanzar todo lo que me he propuesto. Dios misericordioso, me abandono en tus manos para que conduzcas con sabiduría todos mis pasos, los lleves por las sendas del bien y me hagas vivir con tenacidad.

No le temo a nada de lo que pueda acontecer porque Tú estás conmigo. Dame la sabiduría para entender que la vida va cambiando y que yo tengo que ir asumiendo esos cambios con valentía, sin miedos que me paralizan. Quiero tener junto a Ti la libertad para no tener una vida estancada, sino una en la que tenga la capacidad de buscar plenitud e ir desarrollando todo lo que por tu inmensa bondad me regalas.

Lléname de Ti, porque quiero ser fiel a tu voluntad, quiero ser constructor de tu reino. Gracias por acogerme en tus brazos, por conducirme hacia Ti, no tengo palabras para agradecerte por tantas maravillas que has hecho por mí. No me puedo ir a dormir sin antes de decirte que eres la esperanza que me hace caminar y creo que junto a Ti todo lo que sea para mi felicidad lo voy a lograr.

Amén.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *