ORACIÓN DEL DÍA DOMINGO 28 DE JUNIO

Alabado seas, mi Señor, por este hermoso día que me has permitido disfrutar. Gracias porque me levantas a diario para emprender el camino, ilumina siempre mi andar, que en los momentos de oscuridad y desánimo Tú seas mi guía. Sólo Tú puedes vencer mis miedos y mis temores, Padre Amado, lléname de tu fuerza y de tu amor, para poder vencer los momentos duros.

Quiero que permanezcas siempre junto a mí, sana mi corazón de todas las heridas que no me dejan hacer la vida con tranquilidad.

Gracias por acogerme en tus manos poderosas y no permitir que nada pueda hacerme daño. Reconozco tu misericordia sin medida, la que se derrama en mi corazón y me hace sentir la alegría de la salvación. Te muestras solidario con mis problemas y nunca me abandonas cuando la angustia invade mi alma.

Te pido de corazón que te quedes en mi vida, que nunca te vayas, ayúdame a ser cada día mejor; dame tu fuerza para seguir en pie con la cruz a cuesta; sana mis heridas, perdóname por los errores que he cometido.

Quiero sentir la presencia de tu Espíritu Santo que me prepara para dar lo mejor de mí en cada situación, sé que no soy perfecto pero quiero esforzarme para ser aún mejor. Te abro la puerta de mi corazón para que entres en él y limpies todo lo que no es grato para Ti, sana mis heridas tanto del pasado como del presente. Quiero siempre emprender el día bajo tu presencia y tu protección. Gracias por amarme tal cual como soy, gracias por tu bondad, porque sin mirar mi pasado me das una nueva oportunidad para perdonar, para amar y servir.

Necesito de Ti, sé que eres un Dios de poder, sé que puedes levantarme y reconfortarme para seguir adelante, ayúdame siempre y muéstrame qué es lo correcto para Ti, sé que para Ti nada es imposible, por eso, pongo en tus manos mis más grandes deseos, sé que jamás me has abandonado y confío en que todo sea en tu tiempo y no en el mío. Gracias porque sé que me escuchas, me amas y siempre estás a mi lado. Toma mi vida y llénala de Ti, impulsa el velero de mi vida en este nuevo día con la fuerza de tu Espíritu.

Amén.