Señor, qué bien se siente estar en tu presencia una vez más al iniciar un nuevo día. Gracias por la valentía que le has dado a mi corazón. Por convencerme de que podía dar la lucha. Porque me has sostenido en medio de las batallas. Porque cuando tuve miedo, cuando me creí perdido, cuando ya se me agotaban las fuerzas, ahí estuviste para darme ánimo, para recordarme que podía dar un paso más. Sé que te quedarás porque nunca te has ido, sé que darás el alimento a nuestra vida, que nos darás de beber el agua que salva y nos arroparás con tu amor cuando todo parezca perdido.
Quiero pedirte que me regales la gracia de entender que las cosas que suceden muchas veces no tienen explicación y en mi afán de buscarle una, solamente me desgasto y por ello pierdo de vista lo realmente importante. Permíteme mantenerme en pie para poder luchar cada pelea existencial que hay en mi vida entendiendo que no peleo solo, sino que cuento con tu protección y tu auxilio cuando mis fuerzas se acaban. Dame tu amor que me sostiene en medio de la batalla. Aleja de mí todo mal sentimiento, llévate lo que no conviene, lo que podría apartarnos de tu bendición.
Sé que aún estoy lejos de alcanzar la meta que me he propuesto, pero no me voy a dejar vencer por la adversidad; no le doy poder al negativismo, no le doy espacio a la despesperanza. Me mantengo firme, porque creo en Ti, porque se que abrirás caminos, que me llenarás de todo lo bueno que tienes. Estoy convencido de Ti y sé que Tú lo estás de mí, por eso te doy gracias y voy a actuar conforme a esa confianza. Quiero salir adelante y para eso necesito dejar a un lado el temor que me produce el sentirme muchas veces incapaz de hacer las cosas. Permíteme entender que Tú me has creado con capacidades y con muchos talentos.
Amén.
🙏 AMÉN 🙏 AMÉN 🙏
Amén